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Llevamos 24 días del año y la industria del anime está en una época de cancelaciones y retrasos que no se veían desde la pandemia, pero no estamos en pandemia, si bien Japón tiene problemas con aumento de casos de COVID no se ha llegado al extremo de decretar nuevas cuarentenas, sin embargo estamos viendo que anime estrenado apenas pocos días se están posponiendo, algunos de forma indefinida por problemas de producción, vimos series como NieR: Automata Ver. 1.1a, Ayakashi Triangle y UniteUp! son puestas en el congelador, la producción dice que problemas por el COVID, pero los rumores apuntaron a que Aniplex, el productor que estas series en común tenía algo que ver, pero hoy Kubo-san wa Mob wo Yurusanai también anuncio su pausa pero esta es de Kadokawa no de Aniplex, así que si ya son más las culpables, que carajos está pasando.



Un tuit del animador Kanta Kamei dió pistas de todo lo que esta pasando, la industria del anime a pesar de todos los contratiempos fue una de las grandes beneficiadas de la pandemía porque la gente de todo el mundo empezo a ver anime así sea que sea un consumidor regular o no, esto supuso más dinero para estudios y productoras, en 2018 el anime constituia el 77% de las exportaciones de contenidos de TV de Japón y aún no hay cifras claras pero las plataformas, metiendo más dinero es obvio que la industria iba a tener que producir más, hace un tiempo había mos hablado de cómo y cuanto costaba hacer anime, tenemos que actualizar esa información ya que las cosas han cambiado mucho y los errores de las productoras son los tiempos de producción.

Las productoras literalmente están jugando al límite con los tiempos para hacer un anime, y no, un estudio no hace un capítulo por semana y después los transmiten, los tiempos se miden en el presupuesto y la calidad, ya que un capítulo puede tomar meses mientras que otros días, pero con tanta producción encima, las productoras son las que presionan para que los estudios cumplan el cronograma, y cómo comenta el animador Kanta Kamei, el año nuevo hace imposible cumplir los cronogramas, primero los japoneses que celebran estas festividades que en Japón es muy importante y segundo, los chinos que trabajan en anime, los cuales celebran el año nuevo por 15 días.

¿Según comenta Kanta Kamei, para los chinos es tan importante esta celebración, que algunos han llegado a ofrecerles un aumento 5 veces mayor del salario para que continúen trabajando, pero ellos se niegan, así que no se entiende que teniendo en cuenta estos inconvenientes porque estrenan los anime para enero?

Bueno según se comenta, por la pandemia hay tanto proyecto retrasado, que las productoras se ven entre la espada y la pared para responderle a los patrocinadores por el dinero que ya invirtieron en cualquier proyecto, eso sin contar con las denuncias de explotación laboral que han sufrido algunos estudios.

Algunas de las series mencionadas y pausadas se re-estrenarán en abril y no sabemos si eso afecte a proyectos que ya se tenían contemplados para Primavera, ya que otro de los inconvenientes de la industria es el slot de la TV, por mucha plataforma y dinero que entre de ellas, la TV tiene prioridad para transmitir el anime, y encontrar un espacio para transmitir en un horario que no sea de madrugada (algunas series se transmiten entre la 1 y 3 de la madrugada) es a veces lo que más importa.

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